Un millón de palabras, no pueden hacer que vuelvas, y lo se por que lo he
intentado, tampoco un millón de lagrimas,y lo se porque he llorado hasta
quedarme sin ellas.Hasta que mi alma se secó.Tal vez lo único que duele más que decirte adiós,es no haber tenido la ocasión de haberme despedido de ti.Nuestros recuerdos de ayer durarán toda una vida.Guardar los mejores, olvidar los demás. Esto debe ser una de las cosas que más me costaron y dolieron hacer en
todo este tiempo. Hay cosas que creí que no volverían a pasarme, porqué
creí saber mucho acerca de esto,del amor.Creí saber lo suficiente como
para no equivocarme. Sin duda, es evidente que tengo que aprender que en
esto del amor las experiencias a veces no sirven de mucho. Una vuelve a
caer una y otra vez en los mismos juegos. En las mismas trampas. Y lo
peor de todo,es que al darnos cuenta de eso,a una lo hace sentir como una ingenua.Quisiera decirte tantas cosas...Pero lamentablemente no me queda nada
más que dejarte mis palabras en un blog que,probablemente,ni si quiera llegarás a leer. Quizás critiques el medio. Pero la única razón es
porqué no podía hacerlo de otra manera. Si tal vez me vieras ahora lo
entenderías.Yo podré ser muchas cosas, pero no una
cobarde. Siempre digo a los demás, la vida sigue, el planeta sigue
dando vueltas, no te puedes quedar ahí sentado porqué estás mal.Pero que
difícil es seguir viviendo cuándo estás atada a algo y eso que te ata
resulta ser algo que amas con más fuerza de las que tienen tus piernas
para caminar.Ya las cosas pasaron,pero el dolor sigue aquí,ya dijiste y tomaste tu
decisión, aunque fué algo muy egoísta por tu parte,porque solo pensaste
en tu tranquilidad,en tus sentimientos,y no te importo lo que yo
sintiera.Te quedaste en algunos detalles negativos que no me diste oportunidad de
cambiarlos. Pero bueno, es lo que tú elegiste.Ojala
pudieras ver el otro lado de las cosas.
Pero bueno,no voy a decirte que no te hecho de menos, porque me muero de ganas de estar contigo. Tampoco voy a decirte que no te necesito, porqué me haces falta, y tal vez más que nunca. No voy a decirte que no quiero llamarte, porqué me pongo nerviosa cada vez que tengo el teléfono en mi mano y mis dedos hacen un inesperado intento por marcar tú número.Tampoco voy a decirte que no quiero que me llames. Porque en lo primero que pienso cuando suena el teléfono es en ti. Y para que mentir, si no puedo. Se me nota. Es algo que no puedo hacer. Lo lógico, es que tenga que decirte todo lo contrario para hacer las cosas un poco más fáciles. Pero hay algo más importante que mi orgullo, lo que te prometí.Prometí amarte mientras yo respire. Y eso me juega en contra ahora. Porqué podría dejar esto por el camino más fácil de no haberte prometido algunas cosas. Pero lo hice. Y a pesar de que podría quitar esas promesas, no puedo. Porqué no te voy a dar la posibilidad de que me digas: no cumpliste o me fallaste.Eso nunca.
Y bueno ahora que parece que me encuentro algo mejor,voy ah aprovechar para despedirme.Sentía la necesidad de escribirte todo esto y que esta entrada estuviera
dedicada a ti. Al final tú estás feliz y eso me alegra enormemente,aunque no sea a mi lado.Hasta pronto,princesa.19.
Un día,la vida me golpeó tan fuerte que me enseñó a resistir..Un día,me mintieron de tal manera que me dolió y entonces aprendí a ir siempre de frente con la verdad..Un día,me falló quien menos imaginaba y entendí que las palabras no hay que cumplirlas y hacerse cargo de los propios actos de uno mismo..A veces es necesario dar la vuelta a la página y empezar de cero,aunque eso conlleve sufrimiento..Porque el mejor guerrero no es el que triunfa siempre,si no el que vuelve sin miedo a la batalla.
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